Best Walking Trails & Routes in Monreal

Se trata de un interesante y variado recorrido que transcurre por el camino De Santiago a su paso por Monreal (Navarra). Salimos por el final de la calle mayor. Al principio tenemos una pista amplia que nos va llevando hacia una magnífica regata. A los 15’ llegamos a una regata que forma un sencillo bosque en galería por el que transcurre el camino que llevamos. En ciertos momentos, nos encontramos en un verdadero túnel de espinos que resulta muy fresco en verano y aislante en invierno. En medio de este bosquecillo, podemos ver a unos 100 m el crucero medieval de san Blas, que probablemente señalaba la intersección del camino a Santiago con el camino que lleva hasta Labiano, en El Valle de Aranguren. Continuamos sin ninguna circunstancia especial hasta que a los 40’ ( más o menos, 3 km) tenemos que torcer a la izquierda por un camino que transcurre por el linde de un sembrado. A unos 150 m. encontramos la cascada de Diablozulo. En los meses de verano y en las épocas de sequía, nos encontraremos con unas rocas impresionantes, pero poca agua. En el deshielo y en época de lluvias, es interesante ver esta cascada. Una vez que terminamos de reconocer la zona, volvemos por el mismo agradable camino que hemos traído para venir.

Se trata de un recorrido por el camino de Santiago a su paso Monreal. Luego aprovechamos para subir a las ruinas del castillo de Monreal, que dominan el pueblo y todo el valle, siendo un lugar privilegiado en toda la zona. Comenzamos el recorrido unos kilómetros antes del pueblo. El trazado actual del camino ha buscado la máxima espectacularidad y variedad posible. Por ello, nos encontramos con varios puentes, bosquecillos de robles, prados... Al volver una curva del camino, muy bien señalado, se aprecia el pueblo de Monreal con sus magníficas casas, su castillo y su iglesia. Entramos en el pueblo por un puente medieval, construido en su día para los peregrinos que acudían a Santiago desde Somport y Jaca. Nos adentramos en el pueblo entre casas de piedra de noble y rancia austeridad, pero de gran belleza. Callejeando, nos acercamos a la Iglesia y de allí nos dirigimos a la calle Mayor, que nos acerca poco a poco a la subida al castillo. Tras una empinadísima primera fase, nos acercamos a un mirador sobre el pueblo. Justo debajo de este mirador estaba la judería del pueblo, floreciente durante siglos. Tras este alto en el camino, en pocos minutos podemos coronar el punto más alto del castillo. En él podemos contemplar las ruinas De la Torre del homenaje y otras estancias, incluido un magnífico lienzo norte del castillo que ha sido descubierto recientemente. La vista desde arriba, se adjuntan algunas fotos, es fabulosa y merece la pena contemplarse. En este punto, terminamos la ruta.

Ruta complicada tanto para subir como para bajar el tramo de las cadenas muy lento,el paisaje muy variable y muy bonito !!